Nada sigue igual.
Nada.
Durante el primer año aquí, todo fue
bien. Me costó muchísimo superarlo, y creo que todavía no he logrado hacerlo
del todo. Pero Harry y Susan estaban en todas las redes sociales y al lado del
teléfono todo el día, por si necesitaba ayuda. Me sentía muy sola aquí, pero
saber que ellos estaban ahí para todo me
ayudaba muchísimo.
Todo cambió el día que Harry y yo
nos peleamos. Sucedió hace cuatro años, justo en el primer aniversario de la
explosión.
Mi primer error ese día, fue ir al
instituto. Nada más entrar por la puerta me bombardearon a ‘’lo siento mucho’’,
‘’debes estar pasándolo muy mal’’ y a ‘’ya un año, seguro que lo has superado’’.
A veces pienso que la gente es
verdaderamente gilipollas. ¿Cómo voy a superar la pérdida de mi familia,
separarme de mis dos mejores amigos y cambiarlo todo en un año? Hubiera sido
mejor que no me hubiesen dicho nada. Salí corriendo de clase, no podía más. Al
llegar a mi casa, me conecté a todo. Esperé hasta la hora que suelen llegar a
casa. Deberían estar conectados. Sabían que hoy se cumplía un año de… aquello.
Aquí esta. Susan. Automáticamente empiezo a contarle todo lo que me pasó hoy,
mientras me consuela. Me desahogo, lloro, grito, pero necesito hablar con
Harry. No se conectó en todo el día.
Ahora me
arrepiento muchísimo de lo que hice. Susan me contó que su tío favorito había muerto en un accidente de
tráfico. Necesitaba mi apoyo, me necesitaba. Y yo lo único que hice fue echarle
en cara todo, sin dejarle explicarse. Intenté volver a hablar con él pero no quería hablar conmigo. No pudo
perdonarme; normal.
Encima ahora es ‘’famoso’’. Me
enteré hace apenas dos meses, y supuso un duro golpe para mí. Enterarme de que
millones de chicas le conocían, y de que seguramente había cambiado. De que
había gente que le odiaba sin razón, y de que ya no podría volver a hablar con
él.
Le echo de menos. Sus abrazos, sus
ojos, su sonrisa, sus palabras, su voz. A él. Perdí mi oportunidad. Sólo se que
si le volviese a ver, no le pediría perdón. No por orgullo, sino porque será
mucho más feliz sin mí. Me costó muchísimo tomar esa decisión, pero es lo
mejor. Quiero su felicidad por encima de la mía. Encima ahora es famoso y tiene
a millones de chicas que matarían por hacerle feliz. Después de lo que le hice,
no merezco su amistad. Soy la peor persona del mundo.
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